Un pilar solitario de piedra de Baveno se encuentra entre el tráfico urbano; se construyó en 1612 como ofrenda votiva para el fin de la plaga en 1577. Cristo Redentor, diseñado por Francesco Maria Richini, se encuentra en la parte superior del pilar sobre la plaza del mercado Verziere, de donde toma su nombre.
Fue desmantelado en 1858 porque se consideraba inseguro, pero ya en 1860 se restauró y sirvió como monumento a los levantamientos de Cinque Giornate en Milán. De hecho, los nombres de los caídos están grabados en las placas de latón que rodean la base. Carlo Porta, el famoso poeta dialecto milanés, consideraba el mercado de Verziere como una escuela de idiomas debido a la espontaneidad y vitalidad con que se realizaba el comercio.
Llevó casi un siglo completar el trabajo de la columna Verziere debido a la continua lucha entre las autoridades religiosas y civiles. Durante este período de discusiones, la columna incluso fue derribada. Reconstruida en 1611, cayó dos veces durante el trabajo de construcción.